
Una vez mas, disculparme por el retraso. Toca hablar del
país de las dos tierras, tierras de faraones, tierras del
Nilo.si Roma es la ciudad eterna,
Egipto es el
país eterno. Creo que debe ser una visita obligada para todo aquel al que le guste viajar. Os
daré mil y una razones.
Para empezar sus mas de
500 décadas de historia, las cuales empezamos a descubrir nada mas llegar.
Aterrizamos en la calurosa El Cairo hacia las seis de la tarde, nos dirigimos a Helipolis a cenar para volver al aeropuerto y tomar un avión dirección Luxor. Tras unas cervezas y un ameno vuelo llegamos a Luxor, nos quedaba descansar al día siguiente descubriríamos una cultura milenaria.

Pronto por la mañana nuestro guia y nuestra furgoneta nos esperaba a la puerta de
Pyramisa para empezar las visitas. Cruzamos el
Nilo a la
rivera de los muertos. Primera parada: los colosos de
Memnon. El
siguiente paso seria,
Deir el-
Bahri, templo esculpido en la roca dedicado a una
faraona que simulo es aspecto

de un hombre para poder reinar,
Hatshepsut "¿como se llama?
Hatshepsut"(no os
asustéis, no me
volví loco
es que nuestro guia tras un nombre siempre preguntaba ¿como se llama?y
repetía el nombre, sin comentarios...). De
aquí nos dirigimos al maravilloso valle de los Reyes plagado de tumbas, hoy todas
saqueadas, incluida la "mas famosas pero menos grande"(como
decía nuestro guia) tumba de
Tut-
Ank-
Amon descubierta por el glorioso
Howard Carter. Nos fuimos al
hotel a disfrutar de la piscina y comer algo.
Por la tarde, ya en la rivera de los vivos, visitamos los gloriosos templos de
Karnak y
Luxor. No tengo

palabras
para describir lo que
allí se ve. Es
increíble que eso haya sido levantado hace mas de tres mil años, que siga en pie y que siga impresionando a pesar de estar muy destruidos.
Ra, Amón,
Atón todos nombres de dioses
representados por el sol en distintos momentos de
día. Sol que nos dejaba ya en nuestro primer
día en L
uxor dando pie a la noche. Tras unos
gintonic en nuestro
luxury luxor hotel, nos decidimos a conocer la noche de
Luxor. Un
pub bastante
vació y una fiesta "de
prao" estilo
egipto en la que solo
había hombres nos llevaron de retirada al hotel pasando por una aventura en
motocarro.
Decidimos pasar al mañana
siguiente disfrutando del hotel para, por la tarde, cruzar a la rivera

de los muertos y visitar el valle de los artesanos,
Deir el-
Medina, con pinturas conservadas
perfectamente y sus 42 grados y aire caliente del desierto cual secador de pelo
apuntándote a la cara. De
aquí al templo de
Ramses II, muy poco conocido pero con un coloso de
Ramses construido en un solo bloque de piedra. Hoy el coloso esta derruido por "el terremoto que desolo E
gipto en el 27 d.c".

Comimos en un restaurante de lugareños para
disfrutar de un paseo en "
faluca a motor" por el N
ilo y terminar en nuestro hotel, donde vimos atardecer sobre el
Nilo, cenamos, disfrutamos de la final de la
champions y nos fuimos al aeropuerto. Destino: El
Cairo.
Luxor, su avenida con mas de 100 esfinges, sus 20 centenares de tumbas reales, sus templos, los 10 mil intentos de estafa que sufres, los escasos 15 minutos que tardas en darte cuenta de que estas rodeado de una civilizacion que, a pesar de haber pasado cincomil años sigue impresionando al mundo, el encanto de ser el Egipto profundo, con un aire antiguo, aire del desierto por el que pasearon faraones que fueron lideres del mayor imperio que conoció la tierra durante muchos años, aire que en ese mismo instante inunda tus pulmones, una ultima bocanada nos sirvió de despedida. Nos quedaban dos días y pico por delante para disfrutar de El Cairo.

El primer día visitamos las pirámides de Guiza, el caótico museo arqueológico de El Cairo, pasemos por lo mas profundo del barrio musulmán, cenamos en un impresionante restaurante a las orillas del Nilo, el Secuoya, y nos tomamos una en el jazz Club.
Al
día siguiente cogimos el metro, que cuenta con un
vagón solo para mujeres, para visitar el barrio
Copto(no
interruptus de
momento aunque cada vez quedan menos), de
aquí a la ciudadela de
Saladino, y los jardines de azahar, donde comimos en una
terraza disfrutando de las vistas. Por la tarde paseo por el mercado
Kha El-
Khalili, tomarnos un zumo de

caña de
azúcar en bolsa por un barrio de El
Cairo mas pobre y profundo, jugamos un
partidin callejero con niños locales y terminamos cenando en un restaurante típico y tomando la última cerveza en el "Bar de Paco" cerca de casa de
Maiki.
El
Cairo, sus
26 millones de habitantes, los paseos por sus barrios

mas profundos, los
150 metros de la
pirámide de Guiza(edificio mas alto del mundo hasta la
construcción de la torre
Eiffel), darle un beso a la Esfinge, los
23 años que tarde en visitar esta maravillosa ciudad, sus
100 mil taxis, los zumos en bolsa de plástico por
5 libras, el caótico museo con sus
20 mil restos
arqueologicos, los
31 subvenirs que me compre, la tienda de
Jordi 
en mercado de
Kha El-
Khalili, la conducción temeraria, el maravilloso uso del claxon a todas horas y todos los rincones de esta enorme ciudad. Solo me queda una
razón para completar,
1 anfintrión insuperable que le pone la guinda a un viaje de ensueño.Gracias
Como siempre, este viaje me hizo pensar y creo que "En parte, el arte completa lo que la naturaleza no puede elaborar, y en parte, imita a la naturaleza".