9 de junio de 2010

Egipto: mil y una razones

Una vez mas, disculparme por el retraso. Toca hablar del país de las dos tierras, tierras de faraones, tierras del Nilo.si Roma es la ciudad eterna, Egipto es el país eterno. Creo que debe ser una visita obligada para todo aquel al que le guste viajar. Os daré mil y una razones.
Para empezar sus mas de 500 décadas de historia, las cuales empezamos a descubrir nada mas llegar.

Aterrizamos en la calurosa El Cairo hacia las seis de la tarde, nos dirigimos a Helipolis a cenar para volver al aeropuerto y tomar un avión dirección Luxor. Tras unas cervezas y un ameno vuelo llegamos a Luxor, nos quedaba descansar al día siguiente descubriríamos una cultura milenaria.

Pronto por la mañana nuestro guia y nuestra furgoneta nos esperaba a la puerta de Pyramisa para empezar las visitas. Cruzamos el Nilo a la rivera de los muertos. Primera parada: los colosos de Memnon. El siguiente paso seria, Deir el-Bahri, templo esculpido en la roca dedicado a una faraona que simulo es aspecto de un hombre para poder reinar, Hatshepsut "¿como se llama? Hatshepsut"(no os asustéis, no me volví loco es que nuestro guia tras un nombre siempre preguntaba ¿como se llama?y repetía el nombre, sin comentarios...). De aquí nos dirigimos al maravilloso valle de los Reyes plagado de tumbas, hoy todas saqueadas, incluida la "mas famosas pero menos grande"(como decía nuestro guia) tumba de Tut-Ank-Amon descubierta por el glorioso Howard Carter. Nos fuimos al hotel a disfrutar de la piscina y comer algo.
Por la tarde, ya en la rivera de los vivos, visitamos los gloriosos templos de Karnak y Luxor. No tengo palabras para describir lo que allí se ve. Es
increíble que eso haya sido levantado hace mas de tres mil años, que siga en pie y que siga impresionando a pesar de estar muy destruidos.

Ra, Amón, Atón todos nombres de dioses representados por el sol en distintos momentos de día. Sol que nos dejaba ya en nuestro primer día en Luxor dando pie a la noche. Tras unos gintonic en nuestro luxury luxor hotel, nos decidimos a conocer la noche de Luxor. Un pub bastante vació y una fiesta "de prao" estilo egipto en la que solo había hombres nos llevaron de retirada al hotel pasando por una aventura en motocarro.
Decidimos pasar al mañana siguiente disfrutando del hotel para, por la tarde, cruzar a la rivera de los muertos y visitar el valle de los artesanos, Deir el-Medina, con pinturas conservadas perfectamente y sus 42 grados y aire caliente del desierto cual secador de pelo apuntándote a la cara. De aquí al templo de Ramses II, muy poco conocido pero con un coloso de Ramses construido en un solo bloque de piedra. Hoy el coloso esta derruido por "el terremoto que desolo Egipto en el 27 d.c". Comimos en un restaurante de lugareños para disfrutar de un paseo en "faluca a motor" por el Nilo y terminar en nuestro hotel, donde vimos atardecer sobre el Nilo, cenamos, disfrutamos de la final de la champions y nos fuimos al aeropuerto. Destino: El Cairo.

Luxor, su avenida con mas de 100 esfinges, sus 20 centenares de tumbas reales, sus templos, los 10 mil intentos de estafa que sufres, los escasos 15 minutos que tardas en darte cuenta de que estas rodeado de una civilizacion que, a pesar de haber pasado cincomil años sigue impresionando al mundo, el encanto de ser el Egipto profundo, con un aire antiguo, aire del desierto por el que pasearon faraones que fueron lideres del mayor imperio que conoció la tierra durante muchos años, aire que en ese mismo instante inunda tus pulmones, una ultima bocanada nos sirvió de despedida. Nos quedaban dos días y pico por delante para disfrutar de El Cairo.

El primer día visitamos las pirámides de Guiza, el caótico museo arqueológico de El Cairo, pasemos por lo mas profundo del barrio musulmán, cenamos en un impresionante restaurante a las orillas del Nilo, el Secuoya, y nos tomamos una en el jazz Club.

Al día siguiente cogimos el metro, que cuenta con un vagón solo para mujeres, para visitar el barrio Copto(no interruptus de momento aunque cada vez quedan menos), de aquí a la ciudadela de Saladino, y los jardines de azahar, donde comimos en una terraza disfrutando de las vistas. Por la tarde paseo por el mercado Kha El-Khalili, tomarnos un zumo de caña de azúcar en bolsa por un barrio de El Cairo mas pobre y profundo, jugamos un partidin callejero con niños locales y terminamos cenando en un restaurante típico y tomando la última cerveza en el "Bar de Paco" cerca de casa de Maiki.

El Cairo, sus 26 millones de habitantes, los paseos por sus barrios mas profundos, los 150 metros de la pirámide de Guiza(edificio mas alto del mundo hasta la construcción de la torre Eiffel), darle un beso a la Esfinge, los 23 años que tarde en visitar esta maravillosa ciudad, sus 100 mil taxis, los zumos en bolsa de plástico por 5 libras, el caótico museo con sus 20 mil restos arqueologicos, los 31 subvenirs que me compre, la tienda de Jordi en mercado de Kha El-Khalili, la conducción temeraria, el maravilloso uso del claxon a todas horas y todos los rincones de esta enorme ciudad. Solo me queda una razón para completar, 1 anfintrión insuperable que le pone la guinda a un viaje de ensueño.Gracias

Como siempre, este viaje me hizo pensar y creo que "En parte, el arte completa lo que la naturaleza no puede elaborar, y en parte, imita a la naturaleza".

3 comentarios:

  1. ¡grande Joacs! Excelsa su descripción del país de los coptos.

    Cultura, viaje, Luxor, mimetización, Bar de Paco, pachangas callejeras y una paconada de fiesta d'prau!!

    Cracks!!

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  2. Yes mundial!! pero no crees q la esfinge es un poco madurita para ti?! je, je. besines

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  3. Joaks, que grande el post! el que? el post! jajajaj. Hay reconocer q el muy hijputaestafador era gracioso.
    Los invitados si que fueron insuperables!
    Nos vemos por los mundos de los yonkies de la exportación!

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